Malik es un árabe argelino respetado en su barrio, y no es de extrañar con su imponente complexión. Cuando las chicas no están disponibles, llama a Tarek, un joven árabe cabileño afeminado con un agujero apretado. Los dos tíos suelen quedar para una cita secreta en los sótanos del barrio, donde Tarek puede chupar la gran polla del matón y darle por el culo como el buen femboy que es.
Nada de charlas, pasan directamente a la acción, ya que Malik no tiene tiempo para eso. Le gusta jugar con su polla y afirmar su dominio metiéndosela hasta la garganta. También le gusta especialmente que le laman los huevos, y hay que decir que sus testículos son enormes, llenos de semen.
El pequeñajo tendrá que aguantar como pueda, porque Malik va a por él como un bruto, sin darle permiso para que le destroce y ensanche el agujero. Y cuando folla, siempre es justo en el centro, muy adentro. Y para terminar, descarga su gruesa y enorme semilla por toda la cara del joven sumiso.
